Un perro anciano maltratado por su dueño y abandonado para ser sacrificado demuestra sus ganas de vivir.
Con 12 años de edad Barabas fue maltratado por su antiguo dueño y dejado a su suerte para que lo sacrificaran. Afortunadamente el perro fue rescatado y demostró a todos sus ganas de vivir.
Barabas había desarrollado una gran herida en su oreja derecha y el dueño del can no le prestó atención. La herida se fue haciendo cada vez más grande y finalmente engulló la mitad de la cara del perro, dejando al descubierto el cráneo.
La organización SOSD acudió al rescate del perro y cuando un joven anónimo de Singapur se enteró de la historia de Barabas quisó ayudarlo.
Cuando el joven vio en persona a Barabas se le destrozó el corazón de ver el estado en el que se encontraba el perro.
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